Los riesgos de una endodoncia: por qué no deberías tomar este tratamiento a la ligera

La endodoncia es uno de los tratamientos más comunes en la odontología, ideal para salvar dientes que de otro modo se perderían por daño o infección.

Sin embargo, no es un procedimiento que deba tomarse a la ligera. Es importante conocer los riesgos potenciales asociados a una endodoncia y por qué es esencial realizarla en un ambiente seguro y controlado, bajo manos expertas.

Si alguna vez te han hablado de una endodoncia, es probable que la idea no te haya sonado divertida. Este tratamiento es una de las intervenciones dentales más serias que puedes necesitar, y no es algo que te convenga tomar a la ligera. Hablemos claro: una endodoncia, mal hecha, puede convertirse en una pesadilla. No solo se trata de “quitar el nervio” o de “limpiar el diente”; es mucho más complejo que eso.

Cuando alguien decide hacerse una endodoncia, está poniendo en juego mucho más que la comodidad de un diente; está arriesgando la integridad del diente mismo, asi como su lado bueno del tratamiento, que es darle una oportunidad mas a tu diente y retirar algun dolor dental. Aquí te explico los riesgos y por qué tienes que pensártelo bien antes de elegir dónde y con quién hacerte este procedimiento.

¿Por qué es un procedimiento delicado?

A diferencia de otros tratamientos dentales, la endodoncia implica trabajar en el interior del diente, específicamente en los conductos radiculares, donde se encuentra el nervio y la pulpa dental. Este espacio es extremadamente pequeño y requiere gran precisión. Un pequeño error puede ocasionar dolor prolongado, infecciones, o incluso la pérdida del diente.

Dr. kevin realizando el procedimiento de Endodoncia bajo microscopio dental, observando a la patalla de su monitior, en donde se aprecia una imagen amplificada de lo que se ve atraves del microscopio.

Riesgos de una endodoncia:

1. InfecciónAunque el objetivo de la endodoncia es eliminar la infección dentro del diente, si el procedimiento no se realiza correctamente, existe el riesgo de que la infección persista o vuelva a aparecer. Esto puede suceder si el endodoncista no logra desinfectar completamente los conductos o si utiliza equipo no esterilizado.

2. Fracturas en la raíz dentalDurante el proceso, es posible que la raíz del diente se debilite y se fracture, lo que compromete la estructura del diente. Esto puede ocurrir si se aplica demasiada presión o si la preparación del canal no es adecuada. Las fracturas a menudo son irreparables y pueden llevar a la extracción del diente afectado.

3. Obstrucciones en los conductosA veces, existen obstrucciones naturales en los conductos radiculares, como curvaturas o depósitos de calcio. Si el endodoncista no cuenta con la habilidad o herramientas adecuadas, puede ser incapaz de tratar correctamente estos conductos. Esto aumenta el riesgo de que el procedimiento falle.

   
   

   

   Esta imagen de un caso clinico de internet se puede mostrar la anatomia interna de un molar, los orificios oscuros indican la entrada pequeña de los canales en donde estaban los nervios, en la imagen inferior de color gris, se muestra la anatomia radicular de las raices, mostrando el largo y las curvauras complejas.

   
   

4. Perforaciones accidentalesAl limpiar y ensanchar los conductos radiculares, el profesional puede perforar accidentalmente el diente o la raíz, lo que lleva a complicaciones adicionales, como una infección severa. Este tipo de perforación suele requerir tratamientos adicionales y puede resultar en la pérdida del diente.

   
   

5. Dolor postoperatorio y sensibilidadAunque es común sentir algo de dolor o sensibilidad después de una endodoncia, en algunos casos el dolor puede persistir debido a inflamación o complicaciones. Es vital que el tratamiento se realice en un entorno controlado y que se utilicen técnicas adecuadas para minimizar estos efectos secundarios.

   
   

   La importancia de un ambiente controlado y profesionales capacitados

   Un ambiente controlado significa que se están utilizando equipos de última tecnología, como microscopios y materiales esterilizados, para minimizar los riesgos de infección o error. Además, un endodoncista especializado tiene la capacitación y experiencia para enfrentar los desafíos de este tratamiento, garantizando los mejores resultados posibles.

   
   

   La endodoncia es una solución excelente para salvar dientes dañados, pero no debe realizarse de manera apresurada o en condiciones no ideales. Al optar por un profesional y una clínica con instalaciones adecuadas, puedes reducir significativamente los riesgos y aumentar las probabilidades de éxito del tratamiento. En LabsEndo, nos enfocamos en ofrecer endodoncias seguras y de alta calidad para proteger tu salud dental y garantizar tu tranquilidad.